El juicio por el robo violento de 2016 a Kim Kardashian en París ha comenzado, y se ha convertido en un evento de gran atención mediática. Durante ese incidente, Kim fue atada en su dormitorio mientras los ladrones armados sustraían joyas valoradas en millones de dólares. Este atraco es considerado uno de los más notables en París en décadas.
El tribunal está conformado por un jurado de seis ciudadanos y tres magistrados, lo que indica la gravedad del caso. Un total de diez personas, de las cuales nueve son hombres y una mujer, enfrentan cargos relacionados con el robo y el secuestro de Kim, así como del conserje de la residencia donde se encontraba. Hasta el momento, dos de los acusados han admitido su participación en el asalto, mientras que los demás han negado su implicación.
Kim Kardashian ha planeado testificar de manera presencial en el juicio, aportando su testimonio sobre la experiencia traumática que vivió esa noche. Sus abogados han indicado que su testimonio está programado para el 13 de mayo. En su relato, Kardashian ha compartido cómo se sintió aterrada y en peligro de muerte durante el robo, lo que resalta la gravedad de la situación a la que se enfrentó.
A lo largo de los años desde el incidente, Kim ha hablado abiertamente sobre el impacto emocional y psicológico que el robo tuvo en ella. Su declaración en el programa de David Letterman en 2020, donde recordó sus miedos en aquel momento, ha añadido una dimensión humana a este caso que ha atraído la atención de los medios de comunicación. Este juicio no solo busca justicia para Kim, sino que también ha generado un debate sobre la seguridad y la fama en la vida de las celebridades.