La imposición de aranceles al sector automotriz ha tenido un impacto significativo en las empresas de Coahuila, provocando paros técnicos, específicamente en la planta de General Motors en Ramos Arizpe. Esta suspensión de labores, que afecta a 3,500 empleados, tiene una duración de 15 días y es parte de la programación de mantenimiento de algunas líneas de producción, según el comunicado del gobierno del estado.
El líder estatal de la CTM en Coahuila, Tereso Medina Ramírez, mencionó que el paro busca la conservación de los empleos y los derechos de los trabajadores, aunque se había informado previamente sobre el despido de 200 empleados. En la planta se producen modelos como la Blazer, la Equinox y el vehículo eléctrico Cadillac Optiq.
Se ha indicado que esta suspensión se relaciona con la crisis arancelaria establecida por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien impuso un arancel del 25% a los vehículos producidos en el extranjero, afectando a los importados desde México. La duración del paro técnico dependerá de las negociaciones respecto a estas medidas, así como de las condiciones que presente General Motors, que estaba preparando su informe de operaciones para el primer trimestre del año.
Arturo Reveles, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación, advirtió que, si se aplica la amenaza de Trump, se podrían esperar más paros técnicos en las empresas de la región en el futuro cercano. Esta situación refleja la complejidad del entorno económico y las repercusiones que las políticas comerciales pueden tener en la industria automotriz en México.