La higiene femenina ha sido un tema tabú a lo largo de los años pero con la llegada de la copa menstrual las mujeres se han empoderado sobre su cuerpo y tienen alternativas para elegir entre toallas, tampones o copa.
A pesar de estar en contacto con la sangre propia una vez al mes, sigue generando asco y repele a la población femenina, esta es la causa del miedo que genera el usar la copa ya sea por el tamaño, no saber si duele, las dudas sobre las fugas entre muchas otras dudas.
Conocer las cualidades del flujo menstrual es importante para identificar posibles padecimientos en el aparato reproductor. El uso de la copa obliga a conocer la anatomía porque para introducirla es necesario sentir el cuerpo.
Aparte de ayudar al medio ambiente la ser un producto con una durabilidad de hasta 10 años con los cuidados correctos es una opción para las mujeres alérgicas a los materiales que componen las toallas sanitarias.
La copa tiene muchos beneficios parecidos a los del uso de un tampón pero sin el riesgo de contraer una infección si se usa de manera correcta. Se puede mantener la copa con flujo por 10 horas dependiendo el flujo de cada una.
Con ella se puede hacer ejercicio, nada, andar en bici y cualquier cosa que se pueda imaginar excepto introducir algo más en la vagina ya sea para practicar la masturbación o tener relaciones sexuales.
Para conseguir más información de la copa como el tipo de talla que te conviene más, y consultar marcas certificadas puedes visitar el siguiente link: https://menstrualcupreviews.net/es/como-elegir-una-copa-menstrual/