Selena Quintanilla Pérez, una de las artistas más icónicas de la música latina, fue tragicamente asesinada el 31 de marzo de 1995 a la edad de 23 años. Su muerte ocurrió en un enfrentamiento con Yolanda Saldívar, quien era la presidenta de su club de fans y administradora de su boutique. La artista fue herida con un revólver calibre .38 en el motel Days Inn en Corpus Christi, Texas, mientras intentaba recuperar información financiera necesaria para su declaración de impuestos.
Testigos del incidente relatan que Selena logró salir corriendo del motel, pero colapsó en el vestíbulo, donde fue asistida y llevada a un hospital cercano, donde lamentablemente fue declarada muerta poco después de su llegada. Durante el proceso de investigación, SELENA identificó a Saldívar como su atacante.
Saldívar, tras el suceso, intentó suicidarse y fue arrestada, enfrentando un juicio que atrajo gran atención mediática. Al final, fue condenada a cadena perpetua por el asesinato de Selena y recientemente se confirmó que no obtendrá la libertad condicional, permaneciendo encarcelada.
La muerte de Selena fue un duro golpe para sus seguidores y la comunidad latina en general, dejando un legado musical que continúa influyendo en artistas hasta el día de hoy. Su vida y carrera son recordadas con admiración y tristeza, y su legado perdura a través de su música y la memoria colectiva.