El incidente ocurrido en Tijuana se ha convertido en un tema de preocupación y atención mediática, dado que involucra a agentes de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) en un acto aparentemente ilícito. Los detalles del hecho, que tuvo lugar el 20 de diciembre de 2024, indican que los policías, después de bloquear la entrada a una casa, utilizaron tácticas encubiertas, como colocar capuchas y desactivar cámaras de seguridad.
El video capturado por las cámaras en la propiedad muestra una serie de acciones que sugieren una planificación en el robo, que resultó en el hurto de un vehículo, dinero, ropa, joyas y perfumes. La víctima ha reportado el robo a las autoridades, lo que ha llevado a la intervención de la Fiscalía General del Estado de Baja California (FGE).
Juan Manuel Sánchez Rosales, titular de la SSPC, ha reconocido que los involucrados son agentes municipales, pero ha subrayado la importancia de llevar a cabo una investigación exhaustiva para confirmar la identidad de los mismos y las circunstancias del acto, utilizando herramientas de análisis de inteligencia y revisión de metadatos del video.
Este tipo de situaciones plantea serias dudas sobre la integridad y el comportamiento de quienes están encargados de proteger a la ciudadanía, y pone de relieve la necesidad de medidas de supervisión más estrictas y de rendición de cuentas dentro de las fuerzas policiales. La población espera que se tomen acciones contundentes para abordar este tipo de corrupción y restaurar la confianza en las instituciones de seguridad.