El análisis revela que las propuestas económicas de ambos candidatos a la presidencia de Estados Unidos, la vicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trump, resultarán en un aumento de la deuda nacional, siendo el incremento bajo las políticas de Trump significativamente mayor. Según la Comisión para un Presupuesto Federal Responsable, la deuda aumentaría en 3.5 billones de dólares bajo Harris y en un rango de 7.5 a 15.2 billones bajo Trump.
A pesar de las promesas de ambos candidatos, la deuda federal, que actualmente se sitúa en 28 billones de dólares, podría seguir creciendo debido a los gastos en programas públicos como la Seguridad Social y Medicare. El análisis destaca que el costo de servir la deuda ha superado el gasto en defensa y atención médica para personas mayores, lo que indica una preocupación creciente sobre la sostenibilidad fiscal del país.
Jason Furman, académico y execonomista jefe de la Casa Blanca, señala que los planes de Harris podrían llevar a una reducción o aumento de los déficits en hasta 1.5 billones de dólares, mientras que los de Trump aumentarían los déficits en 5 billones, sin contar ciertas propuestas tributarias que podrían exacerbar este problema. En general, el análisis concluye que la deuda seguirá creciendo a un ritmo más acelerado que la economía, independientemente de quién gane las elecciones.