Las familias desplazadas de Lacanjá Chansayab, en la Zona Lacandona, han solicitado urgentemente la intervención de las autoridades federales y estatales para que se les indemnice o se les facilite el regreso a su comunidad. Fueron forzadas a abandonar su hogar en octubre de 2023 debido a amenazas de grupos del crimen organizado que operan en la región. En una carta dirigida al gobernador Eduardo Ramírez, los desplazados expresaron su deseo de recuperar su patrimonio, que incluye cabañas ecológicas dedicadas al turismo, así como otros bienes que ahora están bajo el control de criminales.
Los miembros de estas familias, que pertenecen a la comunidad tzeltal lacandona, revelaron que si hubieran decidido quedarse, tendrían que haber aceptado trabajar para la delincuencia, lo que implicaría extorsiones y participación en actividades ilícitas. A pesar del reciente operativo de las autoridades, que resultó en la detención de 20 personas, el líder del grupo criminal, Segundo Cabrero López, sigue prófugo.
En su misiva, también mencionaron su derecho al pago por servicios ambientales, ya que han sido responsables del cuidado de la selva, y denunciaron que el crimen organizado ha cobrado recompensas en su nombre. Además, relataron las pérdidas sufridas, que incluyen la muerte de sus animales y la destrucción de sus negocios y tierras.