Después de un paro de 33 días, los estudiantes de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) han entregado las instalaciones de Ciudad Universitaria, aunque han dejado claro que continuarán las mesas de diálogo para asegurar el cumplimiento de su pliego petitorio. En un comunicado, los estudiantes solicitaron regresar a clases presenciales el 2 de abril y pospusieron la entrega de proyectos, tareas y evaluaciones hasta después de las vacaciones de Semana Santa, permitiendo que los participantes en el movimiento puedan regularizar su situación académica.
La rectoría de la BUAP ha confirmado que aún se mantienen conversaciones en algunas facultades. Un acuerdo firmado por los estudiantes establece su compromiso de seguir luchando, aun después de volver a clases. Entre los acuerdos alcanzados se destaca la necesidad de garantizar una elección democrática para la próxima rectoría, asegurando al menos dos candidatos y la realización de un debate público. También se enfatiza la importancia de evitar la intromisión de agentes externos y se exige que los aspirantes a cualquier cargo presenten una carta que certifique su desvinculación de partidos políticos u otras organizaciones.
Además, se acordó realizar un análisis comparativo sobre cómo diferentes instituciones de educación superior llevan a cabo sus procesos de elección, con el objetivo de asegurar el voto directo, secreto y universal en las elecciones de consejeros universitarios y autoridades.