Según un estudio publicado por la consultora Bain, se espera que las ventas mundiales de bienes personales de lujo experimenten una disminución en 2025, marcando la primera caída desde la crisis económica global. Claudia D’Arpizio, autora del estudio, advirtió que la situación podría complicarse si se implementan los aranceles prometidos por Donald Trump, los cuales podrían hacer que las marcas europeas sean mucho más costosas en un mercado que ya atraviesa dificultades.
Trump ha indicado que planea imponer aranceles de hasta un 20% sobre las importaciones, con el argumento de que esto generaría empleos en fábricas y reduciría el déficit, además de bajar los precios de los alimentos. Aunque el estudio de Bain no aborda directamente el posible impacto de estos aranceles, D’Arpizio sugirió que su efecto sobre los productores de lujo europeos dependería de su implementación y de la disponibilidad de productos de lujo estadounidenses que podrían eximirse.
Además, se mencionó que cualquier posible impacto negativo podría ser mitigado mediante la reubicación de la producción a Estados Unidos o por un aumento en las ventas a turistas estadounidenses en Europa. Actualmente, Estados Unidos se posiciona como el segundo mayor mercado de lujo tras Europa, con un valor aproximado de 100 mil millones de euros (106 mil millones de dólares), constituyendo casi un tercio de todas las ventas globales de productos de lujo. Se proyecta que las ventas de bienes de lujo disminuyan un 2% hasta alcanzar 363 mil millones de euros (385 mil millones de dólares) en 2025, en comparación con los 369 mil millones de euros esperados para 2024, debido a los incrementos de precios y la inestabilidad global.