La desaparición forzada de Miguel Huerta Torres, Servidor de la Nación en Temaxcalapa, pone de manifiesto la grave situación de violencia y falta de atención a las víctimas en Guerrero. A dos años de su desaparición, su familia ha denunciado la inacción de la Secretaría de Bienestar y del gobierno estatal encabezado por Evelyn Salgado, así como la negativa de la Fiscalía de Guerrero para realizar búsquedas efectivas en lugares donde podría encontrarse.
Miguel Huerta Torres se dedicaba a llevar programas sociales a su comunidad y había gestionado importantes obras para mejorar la infraestructura local, como un Banco del Bienestar y un Telebachillerato. La falta de apoyo por parte de la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas de Guerrero, que retiró el apoyo económico a su familia, agrava aún más su situación de desamparo.
Esta situación refleja no solo el dolor y la incertidumbre que viven las familias de personas desaparecidas en México, sino también la crítica necesidad de un enfoque más humano y efectivo por parte de las autoridades en la atención a las víctimas y sus familias. La lucha por la justicia y la búsqueda de Miguel Huerta continúa, mientras su familia y comunidad esperan respuestas y apoyo del gobierno.