La película "Criaturas asombrosas" (Le règne animal), dirigida por Thomas Caillez, presenta una exploración inquietante de la mutación y la diferencia biológica en un contexto donde lo monstruoso se convierte en parte de la cotidianidad. La trama gira en torno a François, interpretado por Romain Duris, y su hijo Emile, quien se enfrenta a una serie de cambios extraños en su cuerpo mientras su madre ha sido transformada en una criatura híbrida.
La narración se desarrolla en un ambiente donde las mutaciones son un fenómeno común, generando un clima de caos y falta de sorpresa entre las personas. Este enfoque provoca que el espectador reflexione sobre la aceptación de lo diferente, el miedo a la alteridad y la presión social por conformarse. A nivel personal, el viaje de Emile se convierte en una metáfora del crecimiento adolescente y la lucha por aceptar su identidad en un mundo que puede ser hostil.
Visualmente, Caillez logra crear una atmósfera rica y conmovedora, utilizando maquillaje, prótesis y efectos especiales que le dan vida a las mutaciones de manera realista, evitando caer en los excesos típicos del cine comercial estadounidense. La interacción entre los personajes, especialmente la relación padre-hijo, se convierte en el núcleo emotivo de la historia, mientras que el trasfondo social plantea cuestiones sobre la compasión, la diferencia y la conexión con la naturaleza.
El mensaje de la película, que invita a reflexionar sobre la naturaleza y su papel en la vida humana, se presenta de manera clara, aunque algunos críticos consideran que esta transparencia puede limitar el alcance de la obra. En definitiva, "Criaturas asombrosas" es un film que combina elementos de ciencia ficción, drama y horror, ofreciendo una mirada profunda sobre la identidad, la aceptación y el poder de la naturaleza.