El Plan C, como parte de la agenda legislativa del presidente Andrés Manuel López Obrador y su administración, avanza con la propuesta de trasladar la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Esto sigue a la reciente promulgación de una reforma judicial y refleja la intención de seguir impulsando cambios significativos en la estructura del gobierno y la seguridad en México.
El senador Ignacio Mier, representante de Morena, ha indicado que se espera que el dictamen sobre la Guardia Nacional sea aprobado rápidamente en la Cámara de Diputados, en una sesión programada para esta semana. Mier también mencionó que se discutirán otras reformas, incluyendo aquellas relacionadas con los derechos de pueblos indígenas y afro-mexicanos.
El coordinador parlamentario de Morena, Ricardo Monreal, había manifestado anteriormente que se planeaba discutir y posiblemente aprobar ambas reformas en los días venideros, lo que indica un esfuerzo coordinado dentro del partido para avanzar con los cambios legislativos pertinentes. La celeridad con la que se están aprobando estas reformas señala la intención del gobierno de consolidar sus propuestas y realizar cambios significativos en las instituciones del país.
El enfoque en la Guardia Nacional es especialmente pragmático, dado el contexto de seguridad que enfrenta México, y su integración a la Sedena podría reflejar un intento de centralizar y fortalecer el control militar sobre cuestiones de seguridad pública. Esto ha generado diferentes opiniones y debates en la sociedad y entre los diferentes actores políticos, dada la preocupación por los derechos humanos y el papel del ejército en la vida civil.