El operativo llevado a cabo en la Plaza Izazaga 89 de la Ciudad de México fue parte de una iniciativa para combatir el comercio ilegal de mercancías. La operación, que involucró a la Secretaría de Seguridad Ciudadana y la Secretaría de Marina, resultó en la confiscación de 88 mil piezas de contrabando, que serán destruidas por el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI). Este operativo se enmarca dentro del "Plan México", que busca fortalecer la economía local al reducir las importaciones y promover la fabricación nacional.
Luis Enrique Vázquez Rodríguez, secretario técnico de la oficina de control de comercio exterior, subrayó que la operación tiene el propósito de inhibir la venta de mercancía que ha ingresado al país de manera ilegal y de proteger la propiedad de las marcas. Además, el operativo responde a denuncias recibidas por la Secretaría de Economía.
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, también mencionó este plan en su conferencia matutina, resaltando su objetivo de fomentar la producción nacional y asegurar que se fabriquen en el país bienes que actualmente no se producen. La colaboración entre distintas secretarías de gobierno muestra un esfuerzo coordinado para enfrentar los problemas de comercio ilícito y promover un desarrollo económico sostenible en la región.