La presidenta Claudia Sheinbaum ha delegado a Luisa María Alcalde, presidenta nacional de Morena, y a la gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, la decisión sobre la afiliación de Miguel Ángel Yunes, quien proviene de una familia que ha sido criticada por actos de corrupción. Sheinbaum enfatizó que corresponde a las instancias internas del partido abordar estos temas, resaltando el papel de Alcalde y el Comité Ejecutivo en mantener la honestidad y justicia dentro de Morena.
Al ser cuestionada acerca de la inclusión de Yunes, Sheinbaum aclaró que su responsabilidad como presidenta es fortalecer el movimiento, diferenciándolo de un partido político en el sentido convencional, y destacó la importancia de la justicia en su gobierno.
Además, al ser mencionada la cohesión de los diputados locales de Veracruz en torno a Nahle, Sheinbaum indicó que es positivo que haya un debate interno en Morena y que no exista un pensamiento único. Subrayó que esta diversidad de opiniones es saludable para el partido, y que la resolución de estos asuntos debe surgir de un diálogo constructivo entre sus miembros.