Gianmarco Tamberi, el carismático saltador de altura italiano, ha vuelto a ser protagonista de un incidente singular en el marco de los Juegos Olímpicos de París. Durante la ceremonia inaugural, en un ambiente festivo y lluvioso, lamentablemente perdió su anillo de bodas en el río Sena. A través de una emotiva carta abierta en Instagram, Tamberi se disculpó con su esposa, Chiara Bontempi, expresando su tristeza por lo sucedido y atribuyendo el accidente a la combinación de la lluvia, la pérdida de peso y su entusiasmo desbordante.
En esta ceremonia, Tamberi tuvo el honor de ser abanderado de Italia, junto a la esgrimista Arianna Errigo, lo que lo llevó a navegar en un barco por el Sena, en un formato inusual para la apertura de los Juegos. Su estilo excéntrico y celebraciones memorables, como el compartir el oro olímpico con su amigo Mutaz Barshim en Tokio, lo han convertido en una figura popular en el mundo del deporte. Además, viajando en el avión presidencial con el presidente italiano Sergio Mattarella hacia París, Tamberi describió la experiencia como "el vuelo más emotivo de su vida", utilizando un juego de palabras que aludía no solo a la emoción del momento, sino también a su disciplina atlética.