El pronunciamiento de la oficina en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) resalta la necesidad urgente de restablecer el diálogo entre el gobierno y las familias de los 43 normalistas de Ayotzinapa, desaparecidos hace una década. En este contexto, se invita a la nueva administración de Claudia Sheinbaum Pardo a adoptar un enfoque constructivo que permita esclarecer los hechos y sancionar a los responsables, tanto por acción como por omisión.
La ONU-DH enfatiza la "dignidad inquebrantable" de las madres y padres de los normalistas, quienes continúan en su búsqueda de justicia. Reconociendo el apoyo de organizaciones civiles y de algunos funcionarios comprometidos, la ONU-DH hace un llamado a superar los obstáculos que han impedido avances en el caso. El organismo internacional señala que este caso es emblemático de los retos que enfrenta México en la protección de las personas contra las desapariciones forzadas y subraya la importancia de una agenda enérgica para atender las necesidades de las víctimas y sus familias.
Además, se insta a quienes participan en las movilizaciones a que lo hagan dentro de un marco de respeto y paz, asegurando así el ejercicio democrático del derecho a la reunión pacífica. Finalmente, la ONU-DH reafirma su compromiso para acompañar a los afectados y a las autoridades en la búsqueda de verdad y justicia.