La situación entre México y Ecuador ha generado tensiones diplomáticas tras la elección de Daniel Noboa como presidente de Ecuador. La jefa del Ejecutivo Federal de México, Claudia Sheinbaum, ha declarado que el país no establecerá relaciones diplomáticas con Ecuador mientras Noboa esté en el cargo, argumentando que él fue responsable de la invasión a la Embajada de México, lo que considera una violación a la soberanía nacional.
Sheinbaum también expresó sus dudas sobre la legitimidad de la victoria electoral de Noboa, señalando que incluso la Organización de Estados Americanos (OEA) ha cuestionado la justicia del proceso electoral, lo que ha llevado a otras voces, como la del presidente de Colombia, Gustavo Petro, a adoptar una postura similar, negándose a reconocer a Noboa como presidente y manteniendo relaciones diplomáticas suspendidas.
La mandataria mexicana enfatizó que para que las relaciones se reanuden, deben darse ciertas condiciones, incluyendo la situación de una persona detenida que se encontraba dentro de la Embajada mexicana durante el incidente. Esta postura refleja una fuerte preocupación por lo que se percibe como una falta de respeto a la soberanía y a los procesos democráticos en la región.