Jalen Hurts ha enfrentado numerosas críticas a lo largo de su carrera, pero su perseverancia y capacidad para superar obstáculos han sido clave en su ascenso. Desde ser reemplazado en un campeonato universitario hasta su transferencia de Alabama a Oklahoma, su trayectoria ha estado marcada por la adversidad. Sin embargo, su reciente actuación en el Super Bowl lo ha consolidado como un jugador destacado en la NFL.
En el último Super Bowl, Hurts completó 17 de 22 pases para 221 yardas y lanzó dos touchdowns, además de correr para 72 yardas y una anotación, lo que llevó a su equipo, los Philadelphia Eagles, a una victoria de 40-22 sobre los Kansas City Chiefs. Esta actuación es aún más notable considerando que Hurts había experimentado una derrota en el Super Bowl anterior contra los mismos Chiefs.
A pesar de haber tenido que lidiar con críticas sobre su desempeño en las temporadas anteriores, donde se cuestionaba si su estilo de juego limitaba la ofensiva del equipo, Hurts demostró su capacidad para mantenerse firme bajo presión. Su habilidad para escapar de la defensa y encontrar a sus receptores fue clave en el partido, incluyendo un pase de 46 yardas a DeVonta Smith que contribuyó a una ventaja considerable en el marcador.
Durante el partido, Hurts también lanzó un touchdown de 12 yardas a A.J. Brown y corrió para un touchdown de una yarda, logrando así una actuación que lo iguala a una de las leyendas del fútbol americano: Joe Montana. Este éxito culminó en un contrato significativo de 255 millones de dólares por cinco años, que resalta su valor en el equipo, a pesar de los cuestionamientos que ha enfrentado a lo largo de su carrera.
Con esta victoria y su desempeño destacado, Hurts ha comenzado a cementar su legado en la historia de la NFL, demostrando que es capaz de brillar incluso en los momentos más desafiantes.