La Reserva Federal de los Estados Unidos ha tomado una decisión significativa al recortar las tasas de interés de los créditos interbancarios a corto plazo en un 0.5%. Este es el primer recorte desde 2020 y se basa en un análisis de las condiciones macroeconómicas actuales, donde la tasa de inflación anualizada se sitúa en 2.5%.
Con la nueva tasa de interés promedio anual del 4.9%, se espera que esta medida alivie los costos de vida para los consumidores, reduciendo el precio de alimentos, combustibles, hipotecas y préstamos para autos, entre otros. Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal, destacó que aunque las ganancias laborales han disminuido y la tasa de desempleo ha subido ligeramente, la situación en el mercado laboral sigue siendo alentadora desde la perspectiva inflacionaria.
El Comité de Mercado Abierto parece tener confianza en que se puede alcanzar una tasa de inflación sostenible del 2%, lo que sugiere un optimismo moderado sobre la recuperación económica en curso. Este recorte de tasas es visto como un intento de fomentar el crecimiento económico y aliviar la presión sobre los consumidores en un contexto donde las tasas de interés han estado elevadas durante un tiempo considerable.