El incidente que ocurrió durante el partido entre el Atlético de San Luis y el FC Juárez en la Liga MX Femenil ha generado preocupación y rechazo en el ámbito del futbol. La directiva del FC Juárez tomó la situación con seriedad al informar que una de sus jugadoras fue objeto de gritos racistas por parte de la afición local. Este tipo de comportamiento es inaceptable y va en contra de los valores de respeto e inclusión que se promueven en el deporte.
El FC Juárez, al tomar la decisión de solicitar una investigación a la Federación Mexicana de Futbol (FMF), busca que se tomen las medidas necesarias para abordar el problema de la discriminación en el futbol. La FMF respondió afirmando que la Comisión Disciplinaria ha recibido la solicitud y comenzará un proceso de investigación para evaluar las evidencias presentadas.
Es importante que estos incidentes sean tratados con la seriedad que merecen, y que se tomen acciones para erradicar el racismo y la discriminación en el futbol y otros ámbitos. La comunidad futbolística, así como los aficionados, deben trabajar juntos para crear un ambiente más inclusivo y respetuoso en los estadios y en el deporte en general. La falta de seguimiento o sanciones adecuadas podría llevar a la normalización de comportamientos racistas, lo cual es un reto que enfrenta no solo el futbol mexicano, sino el deporte en todo el mundo.