Un buque de guerra, el destructor USS Spruance (DDG 111) de la clase Arleigh Burke, ha partido de la base naval de San Diego para colaborar en las operaciones del Comando Norte de Estados Unidos en la frontera sur. Esta iniciativa, que se enmarca dentro de las prioridades de seguridad del gobierno de Donald Trump, busca abordar varios temas críticos, como el combate al terrorismo marítimo, la violencia transnacional, la piratería y la inmigración ilegal por mar.
El Comando Norte destacó que esta misión refuerza el compromiso de Estados Unidos con la seguridad fronteriza y que el USS Spruance aportará capacidades militares adicionales en colaboración con el Departamento de Seguridad Nacional. Este buque se suma al trabajo ya realizado por el USS Gravely en el Golfo de México. Además, el Spruance estará acompañado por un Destacamento de Aplicación de la Ley de la Guardia Costera de los Estados Unidos para llevar a cabo estas tareas.