La Fiscalía General de Chiapas ha iniciado acciones legales contra 46 policías del municipio de Comitán de Domínguez, incluidos cuatro mandos, quienes han sido acusados de complicidad en delitos graves como motín, ejercicio ilegal del servicio público y asociación delictuosa. Estos agentes, incluyendo al secretario de Seguridad Pública municipal y otros coordinadores y comandantes de la policía, fueron arrestados por sus presuntos vínculos con grupos del crimen organizado y han sido encarcelados en el penal El Amate.
El operativo que condujo a estas detenciones fue llevado a cabo por la Fuerza de Reacción Inmediata Pakal (FRIP), un nuevo grupo de seguridad establecido por el gobierno. Durante este operativo, se desarmó y detuvo a 92 policías que se oponían a las acciones de la FRIP, usando armas para amenazar al personal del Centro de Contacto Ciudadano (C5) e interrumpiendo la operación policial al alertar a grupos que bloqueaban las vías de comunicación.
Además de las detenciones, se han desmantelado más de 38 puntos de venta de drogas en la vía pública y se detuvo a un líder de una organización delictiva responsable de generar violencia en la región, quien también enfrentará cargos por bloquear y obstaculizar vías de comunicación.
El fiscal general, Jorge Luis Llaven Abarca, ha enfatizado que las investigaciones están en curso y que no se tolerará ningún tipo de impunidad en relación con conductas delictivas. Esto refleja un cambio en la estrategia de seguridad en el área, donde se han intensificado los esfuerzos para desarticular grupos delictivos y restablecer el orden.