El mercado financiero de México ha revisado a la baja sus pronósticos de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) del país, ubicándolo en un 1.45% para este año, lo que representa una reducción de 0.12 puntos porcentuales con respecto a la estimación del mes anterior. Este ajuste es considerable, dado que en junio se esperaba una expansión del 2%, la cual se fue ajustando mes a mes hasta llegar a la actual proyección.
Además, para el año 2025, la previsión del crecimiento del PIB también se ha recortado en dos décimas en septiembre, es decir, a un 1.28%, en comparación con las expectativas anteriores que eran de un 1.68% en junio y un 2% en enero.
Los analistas identifican la gobernanza como el principal riesgo para el crecimiento económico en los próximos seis meses (con 58% de respuestas), seguido por factores como la incertidumbre política interna (18%), los problemas de inseguridad pública (16%), y la falta de estado de derecho (también 16%). Otros factores como la incertidumbre sobre la situación económica interna, la ausencia de un cambio estructural y la impunidad aportan respuestas menores al análisis, pero también son considerados preocupantes.