El peso mexicano cerró este viernes a la baja en el mercado cambiario, marcando su tercera jornada consecutiva de pérdidas, al cotizar en 20.4919 pesos por dólar. Esto representa una devaluación de 5.18 centavos (0.25%) respecto al cierre del día anterior, con un rango de cotización que osciló entre 20.4500 y 20.5460. En comparación con el viernes pasado, el peso ha perdido 11.08 centavos, equivalentes a un 0.54%.
Entre los factores que han influido en esta depreciación se encuentran la reciente aprobación de una reforma que extingue siete órganos autónomos del gobierno, la cual ha generado incertidumbre sobre la estabilidad política y económica del país. Además, la decisión de Moody’s de cambiar la perspectiva de calificación de México a negativa por la Reforma Judicial ha añadido presión al peso.
A pesar de estas pérdidas, la moneda local logró estabilizarse en parte gracias a datos económicos alentadores, como una inflación anual que se desaceleró al 4.56% y un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) que aumentó un 1.1% en términos trimestrales, superando las expectativas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
La fortaleza reciente del dólar también puede atribuirse al triunfo del presidente electo Donald Trump en las elecciones presidenciales, lo cual ha generado un contexto de incertidumbre económica. Algunas grandes empresas, como Walmart, han comenzado a expresar preocupaciones sobre las tarifas que el presidente propuesto durante su campaña podría implementar, y cómo estas afectarían los precios finales para los consumidores.
En resumen, aunque el peso ha perdido terreno frente al dólar en las últimas sesiones, ciertos datos económicos positivos han moderado su depreciación. La situación política y las expectativas económicas continúan influyendo en la dinámica cambiaria.