El senador Ricardo Monreal, tras reunirse con la presidenta electa Claudia Sheinbaum, respondió a las advertencias del embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, sobre la reforma al Poder Judicial en México, que incluye la elección de jueces y ministros. Monreal expresó su respeto por la opinión del embajador, pero no la comparte, argumentando que este no ha leído la reforma en su totalidad.
Declaró que compartirá fragmentos de la reforma que garantizan que la preocupación del embajador no se materializará. Además, anunció que a partir del 26 de octubre se comenzará el debate en la Comisión de Puntos Constitucionales sobre posibles cambios al dictamen. Uno de esos cambios podría incluir la disposición de jueces sin rostro en casos de delincuencia organizada, para proteger la vida de los jueces y sus familias.
El senador también defendió la decisión del gobierno mexicano de no permitir injerencias externas en su sistema judicial, recordando que en muchos estados de Estados Unidos los jueces son elegidos por votación popular. Monreal subrayó la intención de profundizar la vida democrática en el Poder Judicial mexicano, reafirmando la autonomía del país en la redacción de sus leyes.