El caso de la desaparición de una familia de seis personas en el municipio de Emiliano Zapata, Chiapas, es un triste reflejo de la situación de inseguridad y violencia que afecta a diversas regiones de México. El 23 de noviembre, la familia, que incluía a un niño de 12 años, desapareció mientras se trasladaba en una camioneta del transporte público hacia San Cristóbal de las Casas, presuntamente secuestrados por hombres armados que viajaban en otras camionetas.
La Fiscalía General del estado ha confirmado que recibió la denuncia de los familiares y está llevando a cabo las investigaciones pertinentes, intentando identificar a otras personas que podrían haber estado en el vehículo en el momento de la desaparición. La camioneta en la que viajaban fue encontrada abandonada poco después de la desaparición.
Además, es alarmante notar que las desapariciones en Chiapas, como en otras partes del país, a menudo son resultado de la lucha entre grupos del crimen organizado por el control del territorio. Según el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas, en el primer semestre de 2024 se han registrado 632 desapariciones, lo que indica una problemática en aumento en la región.
La situación resalta la necesidad de una respuesta efectiva y urgente por parte de las autoridades para garantizar la seguridad de los ciudadanos y abordar el problema de las desapariciones forzadas en el país.