El análisis del Área de Estudios Económicos de BBVA México sugiere que las nuevas políticas migratorias implementadas durante la segunda administración de Donald Trump podrían tener un impacto limitado en las remesas enviadas a México. A pesar de sus intenciones de reforzar la frontera y aumentar la deportación de migrantes indocumentados, se argumenta que la necesidad de estos migrantes de enviar dinero a sus familias en México podría seguir siendo un motivador poderoso, lo que podría mitigar el efecto negativo en el flujo de remesas.
En su discurso inaugural, Trump reiteró su compromiso de frenar la migración no documentada y vinculó este tema con su victoria electoral, señalando que la percepción pública de los migrantes como responsables de diversos problemas en Estados Unidos ha influido en su apoyo. Sin embargo, varios estudios han señalado que, en realidad, los migrantes indocumentados tienden a cometer menos delitos que aquellos que son nativos de EE. UU.
Desde su toma de posesión, Trump ha tomado múltiples acciones ejecutivas, algunas de las cuales se centran en la inmigración. Estas incluyen clarificaciones sobre el rol del Ejército en la seguridad fronteriza y la declaración de una emergencia nacional en la frontera sur, con el objetivo de fortalecer la vigilancia y la seguridad mediante el uso de barreras físicas y tecnología, como drones. Sin embargo, la efectividad de estas medidas para frenar la migración y su posible repercusión en las remesas seguirán siendo temas de debate y análisis en el futuro.