La titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, Alicia Bárcena, ha respondido a las críticas del embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, respecto a la reforma judicial que propone el presidente Andrés Manuel López Obrador. Bárcena considera que las declaraciones de Salazar constituyen una injerencia en la soberanía nacional de México, al tratarse de un tema interno del país.
En un comunicado, la canciller expresó su desconcierto ante las afirmaciones del embajador, quien había advertido que la propuesta de elección de jueces mediante voto popular podría poner en riesgo la relación comercial entre México y Estados Unidos. Según Salazar, esta reforma podría afectar la democracia mexicana y la confianza de los inversionistas en el marco legal del país, además de abrir la puerta a riesgos de corrupción y manipulación política.
Bárcena defendió la intención de la reforma judicial, señalando que su principal objetivo es fortalecer el Estado de Derecho a través de procedimientos democráticos establecidos en la Constitución. La respuesta de la canciller subraya la importancia del respeto mutuo en las relaciones entre México y Estados Unidos, en el contexto de una discusión crucial sobre la estructura del poder judicial mexicano y su impacto en la democracia y el desarrollo del país.