La aprobación del dictamen para desaparecer organismos autónomos, como el INAI, el Coneval y la Cofece, ha generado una fuerte controversia en el ámbito político en México. Los legisladores de Morena y sus aliados argumentan que esta medida permitirá ahorros presupuestales y mejorará la eficiencia en el gasto social. Sin embargo, la oposición advierte de un potencial retroceso en la transparencia y el acceso a la información gubernamental.
Los críticos de la iniciativa, como los diputados del PRI y del PAN, sostienen que la eliminación de estas instituciones es un intento del gobierno para evitar la rendición de cuentas y fomentar la opacidad. Señalan que el INAI ha jugado un papel crucial en la revelación de casos de corrupción, como el de Segalmex, y que su desaparición podría resultar en una concentración de poder que limita los mecanismos de control sobre la actuación del gobierno.
El debate se centra en la importancia de mantener órganos que, aunque pueden ser percibidos como costosos, tienen el objetivo de salvaguardar la transparencia y la democracia en el país. Estas instituciones autónomas han sido vistas como un contrapeso necesario ante el poder ejecutivo, y su eliminación podría tener efectos significativos en la forma en que la información pública es gestionada y divulgada.
El futuro de la reforma y su impacto en la gobernanza y la participación ciudadana se mantiene en el centro de la discusión política en México.