La Comisión Nacional de Salarios Mínimos en México ha decidido incrementar el salario mínimo un 12%, elevándolo de 7,467 a 8,364 pesos mensuales, y en la franja fronteriza de 11,246 a 12,596 pesos. Esta medida ha sido recibida con entusiasmo por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien la calificó como una buena noticia para el pueblo mexicano, alineada con la filosofía de priorizar el bienestar de los más necesitados. Este aumento se considera el más alto desde 1976 y representa más de tres veces lo que se estima para la inflación del próximo año. Sin embargo, es importante señalar que en el último año del sexenio anterior, el aumento fue del 20%. Sheinbaum también criticó la política de salarios bajos que persistió durante el periodo neoliberal, enfatizando la necesidad de reconocer la dignidad del trabajo en lugar de presumir de "salarios de hambre".