Durante el 6o Informe de Gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador expresó su satisfacción al elogiar a su sucesora, Claudia Sheinbaum, a quien describió como una "mujer excepcional". En su discurso, hizo hincapié en la importancia de la continuidad en la transformación del país y se mostró optimista sobre el futuro bajo su liderazgo. También hizo una crítica directa a la oposición, sugiriendo que de haber ganado, habrían desmantelado los programas de bienestar que su administración ha promovido.
López Obrador utilizó una metáfora familiar para ilustrar la transición de poder, comparando la continuidad de Sheinbaum con la herencia de una obra en construcción. Se permitió extenderse en sus comentarios sobre la hipocresía que, según él, caracteriza a la oposición, citando ejemplos de promesas incumplidas. Su discurso fue un claro respaldo a Sheinbaum, alentando al público a reconocer su liderazgo como la mejor opción para el país.