Representantes de organizaciones defensoras de derechos humanos y familiares de personas desaparecidas en México señalaron que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha dejado una importante deuda en temas de desplazamiento, así como en la situación de la niñez y juventud en comunidades indígenas, además de los casos de desaparición. Estos comentarios fueron realizados durante el Foro "La resistencia desde la esperanza para una vida digna", organizado por el Centro para los Derechos Humanos Fray Juan de Larios en Saltillo, Coahuila.
Las voces críticas provienen de diversos líderes de organizaciones, entre ellos Dora Lilia Roblero García, directora del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas, quien destacó que la situación en Chiapas refleja la crisis de violencia que se experimenta en el país. Roblero García enfatizó que el presidente y el gobernador de Chiapas han recibido información necesaria para investigar los casos de abuso y violencia, pero en lugar de actuar, han desacreditado el trabajo de organizaciones defensoras.
Se informó que en un futuro cercano, alrededor de 50 familias de una comunidad no revelada serían desplazadas, lo que ilustra la minimización de la crisis por parte del mandatario saliente. Según las declaraciones, el gobierno de López Obrador se ha caracterizado por su silencio y falta de acción frente al crimen organizado, mientras que ha atacado a las organizaciones que luchan por los derechos humanos.
Roblero García también comentó que en Chiapas, se vive una situación crítica de violencia y desplazamiento que se podría haber prevenido con una mayor acción de las autoridades. Asimismo, mencionó que muchas personas desaparecidas no son contabilizadas debido a su situación. La dirigente denunció que las condiciones actuales, en las que la población tiene que encontrar rutas seguras para evitar riesgos, son similares a una forma de esclavitud.
Por último, se concluyó que el presidente López Obrador deja una pesada carga de omisiones y complicidad con el silencio frente a la crisis de violencia que afecta a los pueblos originarios de México.