Mario Marín, exgobernador de Puebla, ha salido del penal del Altiplano y ahora podrá continuar su proceso judicial en libertad, en su domicilio. La salida se realizó bajo la custodia de la Guardia Nacional, lo que ha generado que el presidente Andrés Manuel López Obrador exprese su descontento. López Obrador mencionó que el hecho de necesitar múltiples patrullas para la seguridad de Marín es un reflejo de las prioridades en materia de seguridad pública.
Marín, quien fue condenado por tortura en el caso de la periodista Lydia Cacho, salió del penal alrededor de las 23:30 y llegó a su casa en Puebla a las 04:00 hrs del día siguiente. El presidente también hizo hincapié en que el gobierno debe pagar multas por no haber cumplido con la orden de liberación inmediata de Marín, que debió darse el fin de semana anterior. Este hecho, según López Obrador, pone de relieve la necesidad de reformar el Poder Judicial para evitar situaciones similares en el futuro.
Esta situación ha causado preocupación y es un reflejo de los desafíos que enfrenta el gobierno en la administración de justicia, particularmente en casos de figuras públicas involucradas en delitos graves.