En Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, activistas y miembros de la comunidad LGBTTTIQ+ han expresado su desacuerdo con la reciente designación de Sahara Munira José Flores como diputada local de representación proporcional por el partido Morena, en la cuota afirmativa de diversidad sexual. Los manifestantes argumentan que Sahara Munira no pertenece a la comunidad LGBTTTIQ+ y que su nombramiento representa una usurpación de una curul destinada a dicha comunidad.
Carmen Velasco, coordinadora estatal de la Red por la Inclusión de la Diversidad Sexual en Chiapas, mencionó que Sahara se postuló como mujer lesbiana, a pesar de estar casada con Fitzgerald de León Villard, lo cual, a su juicio, deslegitima su representación. La red también criticó la inacción de la familia León Villard en el Congreso, señalando que no han presentado propuestas en favor de la comunidad LGBTTTIQ+ y, en cambio, han obstaculizado sus derechos.
Por otro lado, el Observatorio Ciudadano de Derechos de la Comunidad LGBTTIQ+ en Chiapas sugirió que la elección de Sahara Munira podría ser un ejemplo de tráfico de influencias dentro de las redes familiares que buscan perpetuar el control político. Afirmaron que estas prácticas despojan de seriedad la lucha por los derechos de la comunidad y trivializan la participación ciudadana.
El Observatorio también hizo un llamado a las personas que puedan interponer recursos legales para asegurar la representación política efectiva de la población LGBTTIQ+, enfatizando que su lucha es colectiva y debe ser respaldada por vías institucionales.