"¡Hola, México! ¡Es un placer estar aquí!" fue lo que exclamó Paul McCartney al inicio de su emocionante concierto en el Estadio GNP Seguros. Desde el primer momento, el rockero británico conectó con su audiencia, entregando una actuación que celebró su legado musical.
El repertorio de la noche incluyó una mezcla de clásicos de Los Beatles, canciones icónicas de Wings y éxitos de su carrera como solista, llevando a los fans a un viaje nostálgico a través de su extensa discografía. McCartney se mostró enérgico y carismático, contagiando su alegría al interpretar temas como "Hey Jude", "Let It Be" y "Live and Let Die".
Los aficionados, llenos de entusiasmo y emoción, corearon cada canción, creando una atmósfera mágica que solo un artista de su calibre puede generar. La conexión con el público fue palpable, y cada acorde resonó en el corazón de los presentes, quienes no pararon de bailar y cantar a lo largo del espectáculo.
La experiencia fue una celebración de la música, el amor y la comunidad, destacando una vez más la profunda admiración que los mexicanos sienten por Paul McCartney y su legado musical. Con dos conciertos en el horizonte y su participación en el festival Corona Capital, el legendario músico sigue dejando huella en su paso por México.