La reciente detención de cinco miembros de la Guardia Nacional en Jalisco, quienes fueron encontrados con aproximadamente 50 mil dólares en efectivo y armamento, ha provocado una reacción significativa por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). En un comunicado, la Sedena subrayó que estos agentes no provienen del cuerpo militar, sino de la extinta Policía Federal, lo que genera interrogantes sobre la integridad y los valores de este personal.
La Sedena, al abordar la situación, enfatizó que la detención refuerza las percepciones negativas sobre la Policía Federal, destacando la falta de ética, moral, y la tendencia a la corrupción que, según la dependencia, persiste entre algunos exmiembros de esta corporación. A pesar de que la Guardia Nacional está actualmente bajo la supervisión de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, la Sedena aclaró que la investigación que llevó a la captura de estos agentes fue realizada internamente por la propia Guardia Nacional como parte de sus controles y supervisión.
Asimismo, la Sedena afirmó que la institución militarizada continuará colaborando con el Ministerio Público para resolver el caso, y se comprometió a supervisar el comportamiento de su personal para prevenir futuros incidentes de ilegalidad. Este episodio pone de manifiesto los desafíos que enfrenta la Guardia Nacional en su proceso de consolidación y la importancia de mantener la integridad dentro de sus filas.