Las recientes acusaciones contra Sean “Diddy” Combs han llevado a un aumento significativo en la atención mediática y pública sobre el caso. Las demandas presentadas ante la Corte Suprema de Nueva York alegan graves delitos de agresión sexual, uno de los cuales involucra a un niño de 10 años y otro a un joven de 17 años. Estas alegaciones se suman a una serie de denuncias previas donde otros individuos han afirmado haber sido víctimas de conductas similares por parte del magnate del hip-hop.
Los abogados de Combs han desestimado las acusaciones, enfatizando su confianza en los hechos y en el proceso judicial, y han acusado al abogado de las partes demandantes de buscar notoriedad mediática. Combs, de 54 años, se encuentra actualmente en prisión, enfrentando cargos de tráfico sexual, así como alegaciones de coerción y abuso.
La demanda relacionada con el niño alega que durante una supuesta audición, este fue drogado con un narcótico añadido a un refresco y luego agredido sexualmente por Combs. Por otro lado, la acusación referente al joven de 17 años también cuestiona el comportamiento del productor musical en un contexto similar ligado a la realización de un programa de televisión.
El caso destaca una creciente ola de acusaciones de agresión sexual en la industria del entretenimiento, lo que ha llevado a un escrutinio más atento de las conductas de figuras prominentes en el ámbito. Se anticipa que el proceso judicial arrojará más luz sobre estas serias alegaciones en los próximos meses.