El documento informa sobre las revelaciones de la exembajadora de Estados Unidos, Roberta Jacobson, en relación a Genaro García Luna, quien fue secretario de Seguridad Pública durante el gobierno de Felipe Calderón. Jacobson afirmó en una entrevista que el gobierno estadounidense tenía conocimiento de los vínculos de García Luna con el narcotráfico, específicamente con el Cártel de Sinaloa y su líder Joaquín "el Chapo" Guzmán.
Jacobson enfatiza que, aunque Estados Unidos recopiló información sobre la corrupción de García Luna, no se puede culpar a su gobierno por no actuar, ya que asegura que el gobierno mexicano también tenía acceso a esta información. Según ella, la información que recibía el Departamento de Estado provenía de funcionarios mexicanos, quienes eran los que más sabían sobre la corrupción en el entorno de García Luna.
Además, Jacobson menciona que su conocimiento sobre la situación se remonta incluso al sexenio de Vicente Fox, cuando desempeñaba funciones en el "Mexican Desk" del Departamento de Estado, antes de asumir más responsabilidades en la relación con México a partir de la Iniciativa Mérida.
Estas declaraciones sugieren una compleja red de información y, posiblemente, complicidad en temas de narcotráfico y corrupción dentro del gobierno mexicano durante esos años.