El exgobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, enfrenta serias acusaciones de corrupción, incluyendo una orden de aprehensión por presuntos actos de enriquecimiento ilícito y el desvío de más de 5 mil millones de pesos del presupuesto estatal, que deberían haberse utilizado para la construcción de cuarteles policiales, vitales ante la violencia del crimen organizado en la región.
El actual gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla, ha reavivado el interés público en este caso al difundir un video donde muestra la opulenta residencia que habitó Aureoles durante su mandato. Este hogar incluye lujosos elementos como un búnker, piscina, helipuerto, jacuzzi, tinas de hidromasaje y canchas deportivas.
Bedolla, en su mensaje, criticó el estilo de vida de su predecesor y reafirmó su compromiso con los principios de austeridad republicana, optando por no residir en esa propiedad gubernamental. En su lugar, anunció que la casa será transformada en la “Casa Michoacán”, un espacio cultural accesible para la población. Esto refleja un cambio de enfoque en la administración actual, que busca servir a los ciudadanos y promover la honestidad en el gobierno.