La Comisión de Puntos Constitucionales en la Ciudad de México aprobó por unanimidad una reforma a la Constitución en materia de Austeridad Republicana, que establece que ningún servidor público podrá recibir un salario mayor al del presidente de la República, actualmente fijado en 136 mil 700 pesos mensuales. La votación fue de 36 votos a favor, sin en contra ni abstenciones.
La reforma modifica varios artículos de la Constitución (73, 94, 116, 122, 127 y 134) y especifica que las remuneraciones de los altos funcionarios del Poder Judicial, incluyendo a los ministros de la Suprema Corte, magistrados y jueces, no podrán superar el sueldo del presidente. Además, asegura que estas remuneraciones no se verán disminuidas durante su mandato.
Se acordó también que los ahorros generados a partir de la aplicación de estas medidas de austeridad se destinarán al Fondo de Pensiones para el Bienestar. Durante el debate, algunos legisladores destacaron la importancia de la reforma, mencionando que su objetivo es asegurar que los funcionarios públicos tengan salarios justos y estén alineados con las normas de austeridad.
El diputado Gerardo Fernández Noroña enfatizó la necesidad de esta reforma debido a la resistencia de ciertos funcionarios del Poder Judicial a ajustar sus ingresos, subrayando que esta reforma es una medida necesaria para garantizar la equidad salarial entre los servidores públicos.