La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha dejado en claro que la intervención de fuerzas militares estadounidenses en el país para combatir los carteles de las drogas "no está sobre la mesa, ni sobre la silla, ni sobre el piso". Esto ocurrió tras las declaraciones de Ronald Johnson, el nominado como embajador estadounidense en México, quien insinuó que dicha intervención podría ser una opción en situaciones extremas.
Sheinbaum destacó la importancia de la soberanía mexicana y reafirmó que, aunque su gobierno está abierto a la colaboración con Estados Unidos, esta debe realizarse en un marco de respeto mutuo. "No estamos de acuerdo", enfatizó la presidenta, rechazando cualquier posibilidad de intervención militar.
Johnson, durante su audiencia ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense, comentó que cualquier decisión debe tomarse en colaboración con México y que, en caso de que la vida de ciudadanos estadounidenses esté en peligro, se tendrían que considerar todas las opciones. Sin embargo, la respuesta de Sheinbaum subraya que la administración mexicana prioriza la soberanía y el respeto en sus relaciones con Estados Unidos.