En una reciente decisión, el juez C. J. Sailor de la Corte Federal de Distrito en Boston, Massachusetts, desestimó la demanda de más de 10 millones de dólares presentada por el gobierno de México contra seis fabricantes de armas estadounidenses. La demanda es parte de un litigio más amplio en el que México acusa a estas empresas de estar involucradas en el tráfico ilegal de armas, incluyendo pistolas y rifles semiautomáticos, que han sido utilizadas en actos de violencia en el país.
El juez argumentó que no había suficientes pruebas para establecer que las empresas tenían lazos comerciales con Massachusetts, lo que impide la jurisdicción del tribunal en este caso. Señaló que las empresas demandadas no están registradas en Massachusetts, no tienen oficinas o plantas de fabricación allí, y no se ha demostrado que armas vendidas por estas compañías hayan causado daños en el estado. Además, no se presentó evidencia de ciudadanos de Massachusetts que hubieran sufrido daños relacionados con el caso.
Las empresas que se beneficiaron de esta decisión son Barrett Firearms Manufacturing, Beretta USA, Century International Arms, Colt’s Manufacturing, Glock, y Sturm, Ruger & Co. Aunque esta resolución favorece a las empresas demandadas, el litigio en general no se ha cerrado, y el gobierno mexicano podría buscar otras vías legales para abordar la situación.