Política
Paran actividades en Culiacán por violencia
La situación en Culiacán, Sinaloa, es sumamente crítica, marcada por una ola de violencia en la que los enfrentamientos entre grupos armados han generado una atmósfera de miedo e incertidumbre. A raíz de estos conflictos, tanto las escuelas como los comercios han cerrado sus puertas, reflejando la inseguridad que sienten los habitantes de la zona urbana y rural.
Pese a los intentos del presidente Andrés Manuel López Obrador por justificar su estrategia de seguridad y asegurar que hay suficiente presencia de fuerzas del orden, los hechos muestran un panorama despejado de violencia, con reportes de muertos y heridos, incluidos elementos del ejército. La inseguridad ha escalado tras la detención del líder del cártel de Sinaloa, Ismael "El Mayo" Zambada, lo que ha desatado una serie de enfrentamientos en Culiacán.
El gobernador Rubén Rocha Moya, en respuesta a esta situación, anunció la suspensión de clases en escuelas de varias localidades para proteger a los estudiantes y al personal educativo. A su vez, la Cámara Nacional de Comercio local expresó su preocupación por cómo la violencia está afectando no solo la seguridad de los trabajadores, sino también las operaciones comerciales y el bienestar general de la comunidad.
El ambiente en Culiacán es uno de ansiedad y desesperanza, mientras los ciudadanos enfrentan la incertidumbre provocada por la escalada de violencia en su ciudad.