Osiel Cárdenas Guillén, el líder del Cártel del Golfo y figura clave en la fundación de Los Zetas, estaba programado para ser liberado el 30 de agosto, después de haber cumplido 14 años de una sentencia de 25 años en prisión. Sin embargo, su estatus actual sigue siendo incierto ya que su fecha de excarcelación aparece como "desconocida" en el registro del Buró Federal de Prisiones de EE.UU. (BOP).
Expertos apuntan a que podría haber sido liberado, pero el sistema aún no ha sido actualizado para reflejar su salida, o quizás ha sido transferido a otra jurisdicción dentro del sistema penal o correccional. Cárdenas fue capturado y extraditado a Estados Unidos, donde se declaró culpable de varios delitos graves, que incluyen la conspiración para distribuir drogas y lavado de dinero. En 2010, fue sentenciado a 25 años en prisión sin posibilidad de libertad condicional, además de enfrentar una multa significativa y un decomiso de sus bienes ilícitos.
Hasta el momento, permanece en la penitenciaría de alta seguridad USP Terre Haute en Indiana, donde comparte espacio con más de mil reclusos. La situación alrededor de su posible liberación ha captado la atención debido a su notoriedad como líder del narcotráfico en México.