La reciente publicación de la OCDE titulada “Panorama de la educación 2024” destaca la preocupación sobre la inversión en educación en México, que se sitúa por debajo del promedio de otros países miembros. México destina solo el 4.2% de su Producto Interno Bruto (PIB) a la educación, a diferencia del promedio de la OCDE que es del 4.9%. Esta cifra representa una disminución respecto al 5.1% que se invertía en 2021, lo que indica una tendencia preocupante en el financiamiento educativo.
Además, la inversión por estudiante en México es significativamente menor en comparación con el promedio de la OCDE. Actualmente, se invierten aproximadamente 3,513 dólares (62,460 pesos) por alumno, mientras que el promedio en la OCDE es de 14,209 dólares (281,480 pesos). Esta disparidad pone de relieve las limitaciones del sistema educativo mexicano, especialmente para grupos vulnerables como estudiantes migrantes e indígenas, quienes enfrentan mayores desafíos y rezagos en su acceso y calidad educativa.
El informe sugiere una necesidad urgente de aumentar la inversión en educación para mejorar las oportunidades y resultados educativos en el país.