La derrota de México ante River Plate en un amistoso pone de relieve los desafíos que enfrenta el equipo nacional bajo la dirección del entrenador Javier Aguirre. Aunque el Tri comenzó su gira por Sudamérica con una victoria frente al Internacional de Porto Alegre, el descalabro ante River Plate muestra la necesidad de contar con un plantel más sólido y competitivo.
River Plate, que se está preparando para el inicio de la liga local, mostró su fortaleza y dominio, especialmente en la primera mitad del encuentro. Con una inversión significativa en nuevos refuerzos, el equipo argentino se presentó con un nivel alto que fue evidente en el juego, donde Galoppo y Borja se hicieron notar al marcar los goles que sellaron el triunfo.
A medida que México se prepara para el Mundial 2026, en el que será coanfitrión con Estados Unidos y Canadá, el seleccionador Aguirre tiene la tarea crucial de trabajar en la cohesión del equipo y en capitalizar las experiencias de estos amistosos para afinar su equipo. La falta de sus principales figuras debido a la negativa de los clubes mexicanos a ceder a más de dos jugadores en un amistoso no oficial ha complicado este proceso.
El partido en el estadio Monumental de Buenos Aires, lleno a su máxima capacidad, fue testigo de un juego emocionante y competido, pero también una clara advertencia sobre las áreas que deben mejorar el equipo mexicano para enfrentar desafíos mayores en el futuro cercano.