La situación en Villahermosa, Tabasco, es alarmante tras un motín en el Centro de Reinserción Social del Estado (Creset), que resultó en la muerte de siete reos y dejó a otros seis internos y cuatro policías heridos. Este motín desencadenó una ola de violencia en la región, donde se incendiaron aproximadamente una docena de vehículos y al menos seis tiendas de conveniencia. Existen versiones contradictorias sobre la causa del motín: la Fiscalía afirma que los internos tomaron control del penal, mientras que el gobierno sostiene que el conflicto comenzó durante una revisión que descubrió armas y drogas.
La violencia continuó con el asesinato de cuatro personas, incluyendo un carnicero, en una casa de la ranchería Río Tinto, y otro asesinato en la colonia Las Gaviotas Sur, donde un hombre fue abatido desde una motocicleta. Un video que se difundió en redes sociales muestra un acto de saqueo a la víctima tras su muerte.
El fiscal, coronel José Barajas Mejía, acudió al Creset y confirmó que dos internos fallecieron durante los enfrentamientos, lo que indica la gravedad de la situación en el sistema penitenciario y la crisis de seguridad en el estado. Además, un grupo delictivo hizo señalamientos públicos contra el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana del estado, general Víctor Hugo Chávez Martínez, lo que añade un nivel de tensión política a la crisis actual.