Lamar Jackson y Derrick Henry impusieron su dominio en un partido crucial de playoffs, mostrando su capacidad de confundir y desorientar a la defensa rival. La jugada clave, donde Jackson fingió entregar el balón, fue un claro ejemplo de su habilidad para atraer la atención de los defensores, lo que permitió a Henry avanzar sin obstáculos hacia la zona de anotación.
Durante la primera mitad, Baltimore fue imparable. Jackson lanzó para dos touchdowns y Henry, además de sus dos anotaciones, guió el ataque terrestre con una impresionante actuación que resultó en 186 yardas, ayudando a los Ravens a acumular un total de 299 yardas por tierra frente a los 29 yardas de los Steelers, un récord negativo de la franquicia en playoffs.
El entrenador de los Ravens, John Harbaugh, expresó su satisfacción por el desempeño del equipo, destacando la importancia del trabajo en equipo y destacando el esfuerzo de Jackson y Henry en la ofensiva. Con una ventaja de 21-0 al medio tiempo, Baltimore afirmó su control del juego y se preparó para avanzar en la postemporada, enfrentándose a Buffalo o Houston en la siguiente ronda.
La combinación de las habilidades de Jackson como pasador y corredor, junto con la potencia de Henry, demostró ser demasiado para los Steelers, quienes no pudieron encontrar la manera de detener a una de las ofensivas más dinámicas de la liga. Con este triunfo, los Ravens siguen en busca de una mayor gloria en la postemporada.