La situación del sistema de justicia en México al finalizar 2023 es crítica, evidenciada por la gran cantidad de carpetas de investigación y casos pendientes. En total, se registraron 2 millones 654 mil carpetas de investigación pendientes en la Fiscalía General de la República y las 32 procuradurías locales, además de 4 millones 219 mil casos retrasados en los sistemas estatales de justicia. Cada fiscal abrió, en promedio, 127 investigaciones, cerró 106 y terminó el año con 151 pendientes, lo que indica una acumulación significativa de trabajo.
Particularmente alarmante es la situación en estados como Guerrero y Jalisco, donde los fiscales enfrentan una carga excesiva de casos, con más de 1,000 carpetas pendientes por fiscal en algunos casos y cifras que alcanzan hasta 526 mil expuestas en Jalisco. Además, la ratio de jueces y magistrados es insuficiente, con 6,707 en total, representando solo 5.2 por cada 100,000 habitantes, un número muy por debajo de la media de la OCDE.
Los problemas estructurales en la justicia se reflejan en una alta tasa de impunidad, superior al 90%, y un número alarmante de delitos no denunciados. Esto resalta la necesidad urgente de reformas en el sistema judicial para mejorar la capacidad de respuesta y eficacia en la resolución de casos, además de abordar la carga de trabajo que afecta tanto a fiscales como a jueces, contribuyendo al colapso operativo en varias entidades del país.