El atentado contra Alessandra Rojo de la Vega, alcaldesa electa de Cuauhtémoc, ha dado lugar a controversias sobre la naturaleza del ataque. Ulises Lara López, encargado de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, ha señalado que el incidente podría haber sido un "ataque cuidadosamente preparado para aparentar que se trató de un atentado". Esto se produce tras las afirmaciones de Rojo de la Vega sobre la tortura del presunto agresor, Juan "N", quien, según ella, fue obligado a declarar falsamente en su contra.
Lara López rechazó las acusaciones de la alcaldesa electa, afirmando que la Fiscalía se basa en pruebas jurídicas y no políticas, y subrayó que es poco usual que la víctima defienda al agresor. Además, aseguró que hay evidencias sólidas que sugieren que Juan "N" disparó sin la intención de causar daño a Rojo de la Vega, sustentando sus argumentos en evidencia científica más que en testimonios o insinuaciones políticas. La situación ha generado un clima de desconfianza y suspicacias alrededor de la investigación en curso.